Beneficios “históricos” de la banca en un año con récord de despidos

Hay que retrotraerse al año 2007, justo antes de la quiebra del sistema financiero, para encontrar unos beneficios similares a los obtenidos por la banca española en 2021. Los cinco grandes bancos del país -Santander, BBVA, Caixabank, Bankinter y Sabadell- consiguieron el año pasado un saldo positivo de casi 20.000 millones de euros, dando así un giro de 180º a lo sucedido en 2020, cuando perdieron, en conjunto, 5.500 millones de euros.

Los datos son asimismo mejores que los de los años anteriores a la crisis de la COVID-19. Así, el beneficio de estas entidades ha crecido un 46,16% respecto a 2019, y un 19,13% respecto a los resultados de 2018. Antes esto, el Banco Santander y BBVA hablan de números “históricos”, ya que la cifra no se acercaba a esta desde hace 14 años.

Y mientras los beneficios baten récords, también lo hacen los despidos. En 2021, la banca rescindió el contrato a casi 19.000 trabajadores y trabajadoras. De estos, 16.000 salidas corresponden a CaixaBank, Sabadell, Santander y BBVA.

Las cifras de CaixaBank son las que más han influido tanto en la cantidad de beneficios como en la de despidos. La fusión con Bankia le ha reportado una ganancia de 5.226 millones de euros en 2021, y la reestructuración de la plantilla le ha llevado a despedir a casi 6.500 personas. Los beneficios del Banco Santander son superiores: 8.124 millones de euros a pesar de haber gastado 530 millones para poder poner en marcha el ERE que afectará a 3.572 empleados.

BBVA, por su parte, obtuvo un resultado positivo de 4.653 millones de euros. Esto le ha llevado a anunciar el mayor reparto de dividendos de la última década. La lista la completan Bankinter,1.333,1 millones, multiplicando por 2,4 sus beneficios de 2019, que ya fueron de récord; y Banco Sabadell, que superó los 500 millones de euros de ganancia.

Al anuncio de estos beneficios «históricos» llega en un momento en el que la gran banca se encuentra en el punto de mira después de que una campaña reclame «más atención humana» a las personas mayores por parte de las entidades financieras.